Las autoridades de la prisión de máxima seguridad Mal Verde, en Santiago de Cuba, impidieron la visita familiar al líder opositor José Daniel Ferrer, quien lleva más de un mes enfermo en la cárcel.
Este lunes su esposa, Nelva Ortega, acudió al penal junto al hijo de ambos y otros familiares para ver a Ferrer pero luego de casi dos horas en el salón de espera les dijeron que la visita estaba programada para el martes.
Ortega explicó en un video enviado a Martí Noticias que tuvieron que regresar con toda la jaba y las mismas preocupaciones.
"Con la mayor tranquilidad, con la mayor bajeza que normalmente ellos actúan, dijeron que no había visita", explicó.
Según fuentes cercanas a Ortega, Ferrer lleva más de 40 días con diarreas y granos en la cabeza y el cuerpo.
"Nuevamente las autoridades penitenciarias y la mal llamada Seguridad del Estado de Santiago de Cuba nos han negado nuestro derecho de poder verlo. Esta es la cuarta vez que lo visitamos y solamente en una ocasión, por un minuto (y yo que me cogí 2 minutos más), pude verlo junto a nuestro hijo Daniel José, en el pasillo del calabozo", dijo.
La última vez que lo vieron fue el 10 de mayo. "Ese día solamente me dejaron pasar la mitad de las cosas que habíamos llevado. Las dos veces anteriores ni siquiera lo permitieron. Nos negaron prácticamente todo", agregó.
El pasado 29 de abril el régimen cubano revocó la libertad condicional que le otorgaron a Ferrer en enero tras conversaciones entre el Gobierno y el Vaticano.
Durante los meses que el líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) estuvo en su casa fue víctima de amenazas y acoso por parte de la Policía y los agentes de la Seguridad del Estado.
Declarado "preso de conciencia" por Amnistía Internacional, Ferrer, de 54 años, es uno de los 75 opositores encarcelados durante la Primavera Negra de Cuba en el 2003 y ha pasado al menos una docena de años en la cárcel.
En 2003 fue condenado a 25 años de prisión y liberado en 2011 bajo una licencia extrapenal. En 2019 fue arrestado nuevamente y lo condenaron a cuatro años y medio de cárcel.
Seis meses después lo liberaron con una medida cautelar de “limitación de libertad”, que le fue revocada el 11 de julio de 2021, cuando intentó sumarse a las masivas manifestaciones de ese día en Santiago de Cuba.
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